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El conjunto rival encajó pronto el primer gol, obra de Adam con una gran vaselina (foto de arriba), y aguantó hasta casi el final de la primera parte con 1-0. El segundo tanto llegó en los minutos de descuento de estos primeros 45 minutos.
Los hombres del San Viator acusaron el gran desgaste físico, y poco a poco bajaron el pistón, lo que provocó que los locales, sin forzar la máquina, empezaran a traspasar las mallas del guardameta rival. Adam se lució con 5 tantos, y eso que el entrenador le cambió mediada la segunda parte. Antonio del Cerro contaba en la grada, a modo de broma, que había ordenado al míster sustituir al pichichi de la liga para que no se llevase dos balones si conseguía dos 'hat tricks'.
El resto de goles fue cayendo por inercia hasta llegar a los ocho tantos.
Y es que este equipo deslumbra por su juego. Los asistentes al encuentro de ayer, ataviados con las nuevas bufandas del club, disfrutaron de lo lindo, en especial el Frente Mostoleño que terminó encendiendo bengalas producto del júbilo que despierta su equipo. Y es que no en vano el Móstoles C.F. ha terminado campeón de invierno holgadamente, y con el pichichi de la liga en sus filas.
Esperemos que en el 2014, los azulones mantengan el mismo potencial.
